Foro de Redondela V

  ¿Hablamos?



48 comentarios:

  1. Allá voy. Manos a la obra.

    ¡Bieeen, empezamos citando a Jane Austen! ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La primera parte (más allá aún no me adentré) me transporta a un universo muy "austiniano": una casona en la campiña inglesa; una joven "heroina" lecora, sensible y con carácter fuerte; familiares ofreciendo a dicha joven la oportunidad de abandonar el campo y ensanchar sus horizontes; la hermana "descarriada", Hermione, que rompe con los convencionalismos sociales; una madre un tanto peculiar, ...

      Obviamente, todo esto adaptado a la época en la que nos sitúa el autor, pero muy estilo Jane Austen. O a mí me la recuerda.

      Eliminar
    2. No es casual esa orientación que comentas. ¡Bien visto!

      Eliminar
  2. Ahora sí. ¡¡Empecé!!
    3 capitulillos leidos.

    Menudo carácter nuestra Cecilia, ¿no?

    ResponderEliminar
  3. ¡Buena lectura, Marta !

    Esperemos que a todos nos guste esta historia tan intensa... ¡y no decimos más!

    Un saludo y diviértanse.

    ResponderEliminar
  4. Una está leyendo Clarissa y violan a su quizás no tan inocente prima. Demasiado redondo, ¿no?

    ResponderEliminar
  5. ¿No nos gustan los círculos?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Digo yo que esta chica, en vista de los antecedentes, debería elegir sus lecturas con pies de plomo.

      Es normal encontrar a nuestros demonios en nuestras lecturas, a mí me pasa continuamente, pero que nos presagien los desastres es otra cosa.

      Lo dicho, Cecilia, "coidadiño co que les".

      Eliminar
    2. Ah, las lecturas... Bien es conocida la anécdota de aquel devoto que practicaba la vieja tradición de usar la biblia a modo de guía diaria, leyendo al azar un versículo y esperando que este le resultara iluminador. Un buen día, encontró su dedo "Judas arrojó las monedas y se ahorcó". Un poco desconcertado por esa cita, probó de nuevo y esta vez el mensaje fue "ve tú y haz lo mismo". Seriamente preocupado, intentó una última vez desenredar aquel embrollo para encontrarse que "lo que vas a hacer, hazlo sin dilación".

      Moraleja: el que canta su mal espanta, y el que lee...

      Yo de vosotros, quemaría todos los libros en casa y luego esparciría muy lejos las cenizas.

      Nunca se sabe cuándo pueden volver.

      Eliminar
    3. El que lee siempre con la mosca detrás de la oreja. ;)

      Eliminar
    4. Dicen que leer nos hace más sabios y mejores personas, pero no está comprobado. Lo que es seguro es que nos hace más desconfiados. :p

      Eliminar
  6. Segunda parte

    "¿No has matado a nadie hoy? Pero ¿a cuántos has dejado morir?"

    ¡Uff! Menos mal que el autor intercala en la narración esos recuerdos de Turner que le ayudan a conservar la cordura y le motivan en su lucha por la supervivencia. Nos ofrece así una chispa de humanidad entre la barbarie, la destrucción, la muerte y la locura colectiva (el episodio del cuasi linchamiento del "hombrecillo delgado y correoso" de "mirada asustada" "que estaba en la RAF").

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya vimos en la reunión qué significado podemos darle al tal sujeto aviador. - o no, ¡a gusto del consumidor!

      Es un buen ejercicio considerar nuestro propio posicionamiento ante esa situación, ¿entendemos el mecanismo que lleva a esos soldados derrotados, lejos de casa y sin esperanzas intentar linchar al oficial de la RAF o por el contrario condenamos esa actitud ante un compañero del ejército que, además, difícilmente pudo tomar ninguna decisión importante?

      Es llamativo, pues, ese contraste entre las dos maneras de afrontar la crisis: la violencia frente a la violencia o el refugio sereno, pero un tanto falaz, de los propios sueños y esperanzas.

      La realidad histórica fue curiosa: los soldados británicos se sintieron realmente desprotegidos porque los aviones alemanes les atacaban en la playa, pero lo cierto es que las fuerzas aéreas británicas tuvieron un papel determinante, solo que los combates entre aviones se disputaban lejos de donde los soldados embarcaban.

      Al final, ambos combatientes perdieron en torno a los ciento cincuenta aviones cada uno en esos días.

      Eliminar
    2. Volvamos la vista atrás un momento, pensemos en lecturas de temporadas anteriores del Club de Lectura. Qué pasaba en "La ola", y entre alemanes seguimos, o en "Matar a un ruiseñor"?

      Está claro que los hombres tomados uno a uno no nos comportamos de la misma manera que inmersos en la presión del grupo. Ninguna persona, sana física y mentalmente claro, defendería la opción del linchamiento como válvula de escape si se le da la oportunidad de abordar el tema fríamente como nosotros estamos haciendo; sin embargo, esas escenas se producen en el mundo real.

      Somos una raza de ovejas y por eso tendemos a seguir a la primera que da un paso adelante en el grupo. Hay que estar muy atentos para no dejarse arrastrar a la irracionalidad. Y no hablo de situaciones tan extremas como esta, hablo del día a día, de los constantes intentos de manipulación de nuestros gustos, intereses, ideas, hábitos, ... de los poderosos, casi siempre, valiéndose de los medios de comunicación de masas.

      ¡Miña naiciña! ¡De onde parto e onde acabo!

      Eliminar
    3. Esperad...

      " el refugio sereno, pero un tanto falaz, de los propios sueños y esperanzas"

      ¿Por qué falaz? ¿Los sueños y esperanzas son engañosos refugios? ¿Entonces qué nos queda si ya ni soñar podemos para consolarnos?

      Eliminar
    4. Hey, se dijo un tanto falaz , y la clave está en el adjetivo. La idea es que las ensoñaciones de Robbie, sobre su chica, la casa de la playa y su mami, no parecen del todo certeras. Es más un refugio donde dejar vagar la imaginación que un verdadero proyecto futuro. ¿O quizá no?

      Respecto a la propaganda y la guerra, son dos realidades íntimamente relacionadas, especialmente desde la Gran Guerra del 14. Justificar nuestros ataques como justos y precisos y señalar a los del rival como atroces y malignos es el primer paso de todo conflicto moderno. La razón es eso que siempre está de nuestro lado.

      Eliminar
    5. ¿Ensoñaciones certeras? ¡Qué tándem más raro!

      ensoñación.
      1. f. Acción y efecto de ensoñar.

      ensoñar.
      1. intr. Tener ensueños.

      ensueño.
      (Del lat. insomnĭum).
      1. m. Sueño o representación fantástica de quien duerme.
      2. m. Ilusión, fantasía.

      Certero, ra.
      (De cierto).
      1. adj. Diestro y seguro en tirar.
      2. adj. Seguro, acertado.
      3. adj. Cierto, sabedor, bien informado.

      Me lo explique, please.

      Eliminar
    6. Se admite la enmieda. ;) El propósito del comentario era, simplemente, apuntar a que las ideas sobre el futuro de Robbie pueden ser considerados más como una evasión que un plan bien trazado.

      Pero, vaya, que la elección de las palabras dejó mucho que desear. El lenguaje está lleno de trampas, vaya que sí.

      Eliminar
    7. Yo creo que R. usa sus supuestos recuerdos (inventados por B) como combustible del que sacar energía para seguir luchando por su vida.

      Eliminar
  7. Totalmente a favor del happy end.

    ResponderEliminar
  8. Muy animada la reunión ¡genial!

    Gracias a las chicas y al jefe.

    ResponderEliminar
  9. de acuerdo con eso. muy buena reunión. ¡¡fue muy interesante!!

    ResponderEliminar
  10. Eps. Por lo que a mí me toca,
    gracias a vosotras por vuestra participación. Fue una noche la mar de disputada, ¿no?

    ¡A seguir así, jóvenes castoras - digo lectoras!

    (Y a preparar la experiencia radiofónica!)

    ResponderEliminar
  11. Una pregunta que quedó en el tintero. En la primera parte del libro, en la casa de los Tallis, la historia se ordena en capítulos, hasta catorce. Luego en el resto del libro desaparece la división, salvo la de las partes, que corresponden con saltos temporales.

    ¿Tiene algun sentido eso o es pura casualidad? - O lo mismo la prueba de que McEwan no sabe contar muy bien, ¡se pierde después del 15!. :p

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La vida segura y ordenada se rompe, el mundo se convierte en feudo del caos.

      Los límites temporales y el marco espacial se difuminan y entramos en un ambiente medio onírico que no se rige por la razón y la norma.

      La guerra, mayor estupidez de la torpe raza humana, nos arroja al reino de los sentimientos exaltados, el instinto de supervivencia y la dictadura de la adrenalina.

      Eliminar
    2. Hum... Es un tema interesante ese de la 'estupidez de la guerra'. ¿Lo inteligente hubiera sido dejar que Hitler se quedara con Polonia? Ah, qué misterio...

      En el libro, ese sentimiento de inactividad está representado por León, más partidario de dejar que las cosas sucedan que de tomar decisiones. Sin embargo, Robbie tampoco decide nada; es la pequeña Briony, movida por no se sabe qué sentimiento que mezcla celos, deseos y fantasía el motor de toda la historia.

      Eliminar
    3. Es que Hitler era más torpe que la media :p

      La guerra es algo horrible y punto.

      R. decide luchar por C., aunque no le salga muy bien al "coitado"

      Curioso, B. es "el motor de toda la historia". ¡Fastidiaría¡ ¡Es ella quien la escribe! El ojito derecho de mamá, la que reconoce a golpe de página 19 su vulnerabilidad al fracaso, y en la 23 que busca/desea ser adorada. La que se autodefine como "colegiala ávida de exhibirse y alabanzas"...

      Muy de fiar la versión de nuestra narradora, sí señor. ;)

      Eliminar
  12. Hum, pues tan torpe no sería cuando logró por medios más o menos democráticos la presidencia del páis más culto de la tierra. ;)

    Qué interesante tu afirmación de que un soldado no lucha por su país o la gloria, sino simplemente por su casa y su amada. Desde luego, eso humaniza las guerras, aunque a su vez les resta heroicidad.

    La cosa motórica no iba tanto por lo que dices, incuestionable, de que es ella la que relata la historia, sino que su acción es la que precipita todos los acontecimientos. Es la que tira la primera ficha de dominó a la que suceden todas las demás.

    Fundamental, en efecto, esa reflexión sobre la fiabilidad del texto. Precisamente, esa es una de las grandes enseñanzas de la historia: váyanse con pies de plomo, nos cuenta el señor Ian. Ahora nos toca a nosotros aceptar o no el consejo para futuras lecturas.

    ¡Gracias por tanta luz, Marta!

    ResponderEliminar
  13. Solo unos pocos "fanáticos" luchan por la patria, alguno más en busca de gloria, pero la gran mayoría son arrastrados al frente, en ocasiones sin poder elegir bando, y por lo único que luchan es por su supervivencia.

    Efectivamente, B es la "mano inocente" que lanza la primera piedra. Un poquillo aupada por Lolita, eh.

    ResponderEliminar
  14. Hum... Probablemente, el concepto de luchar por la patria ha cambiado bastante. En esta sociedad postindustrial nuestra, tan alejada de grandes ideales, suena bastante anacrónico, pero no estoy muy convencido que valgan esos parámetros para tiempos pasados. Por ejemplo, la fuerza expedicionaria británica que luchó en Francia y se reembarcó en Dunkerque estaba compuesta por voluntarios. - aunque es verdad que una parte de ellos salían así del paro.

    Sí, bien lo explicas: Briony lanza la piedra, y esta se llama Lola.

    ResponderEliminar
  15. "Voluntarios", sí. Pero entre comillas.

    Un buen ejemplo de lo que tú dices son las Brigadas Internacionales de nuestra Guerra Civil: personas idealistas entregadas a una causa, no una patria.

    Mi única patria, la mar ;)

    ResponderEliminar
  16. No vale mucho el ejemplo, o sí: la Internacional fue, en cierta medida, una idea de patria, o al menos la sensación de pertenencia a una unidad vale como ejemplo de ese "patriotismo".

    Independientemente de qué patria escojamos, quizá sea cierto que son tristes las guerras si no es amor la empresa.

    Quién sabe.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya vale, si optamos por definiciones vagas, amplias, entonces mi patria es un corazón.
      ;)

      Mt

      Eliminar
    2. Mira que llamar vago a Miguel Hernández... :p

      Ya puestos, mi patria en mis zapatos / mis manos son mi ejército, que decían unos que eran los Últimos.

      Eliminar
    3. Es un monstruo grande y pisa fuerte...
      Centrémonos.

      Se nos intentó convencer en la reunión, más o menos, de que Expiación era una historia de amor (y guerra, por lo visto). Vale, 303 horas y 43 minutos después acepto el planteamiento; pero solo si añadimos un irrenunciable matiz: es un amor destructivo.

      Nada de mariposas revoloteando, nada lluvias de pétalos de rosas, nada música de violines. Aquí lo que se nos presenta es la cara poco amable de la pasión: desequilibrio, incertidumbre, frenesí interrumpido, separación, renuncia, añoranza, ... ¡Vamos! Un extenso catálogo de humano sufrimiento.

      Y esto si pensamos en Cecilia y Robbie, porque como nos fijemos en Lolita y Marshall o en el señor y la señora Tallis, por el interés te quiero Andrés... O sea, que si de amor ideal estamos hablando peor me lo ponen.

      ¿La otra cara de la moneda? La irrefrenable y apasionada madre/tía/hermana descarriada. ¡Pero sabrán Eros y Afrodita como acabó esa historia!

      Eliminar
  17. Desde luego, ¡qué gente más impresentable acuden a esas reuniones vuestras! Lavadores profesionales de cerebros, con tabla de frotar y jabón Lagarto incluidos, que tratan a toda costa de dejaros los sesos relucientes para luego insertaros sus ideas malignas, ¡un escándalo!

    La pasión -recordemos que los distribuidores, tal vez considerando que la palabra
    Expiación sonaría rara al oído del españolito de a pie, subtitularon la cinta como Más allá de la pasión-, dices, ofrece en este libro un lado áspero, sin violines ni pétalos, pero, ¿no es consustancial con ese sentimiento inflamado ciertos obstáculos?

    Por otra parte, se puede recordar que, desde un punto de vista cristiano, la pasión es un acto de expiación colectivo, y, probablemente, es una referencia que el autor del libro quiso incluir al elegir ese título para su obra.

    Es muy interesante,
    Marta, eso que apuntas sobre Hermione Quincey, la hermana y tía liberal de la familia. A diferencia de Cecilia, mucho más dubitativa y a la espera, la madre de Lola decide tomar las riendas de su vida y partir hacia Paris con su amante, rompiendo los lazos con el pasado y dejando atrás a su familia y su antigua vida. Es significativa la comparación con Emily, la madre de Briony, que escogió una vida más tranquila, pero acaso más lánguida.

    Amor destructivo, se dice en el comentario, y son dos palabras que no terminan de encajar, que tal vez si hay devastación no sea verdadero amor, y viceversa. ¿Quiere decir que el amor semisecreto de Briony por Robbie conduce el carro del destino toda la historia? Quizá, pero la gran historia de amor de la novela es la de Robbie y Cecilia, y parece más que crea esperanzas que desolación. - Digámoslo así, eso es un efecto secundario imprevisto de su relación.

    Aunque, claro, siempre nos quedará la duda de si la relación entre los dos chicos hubiera resistido bien el paso del tiempo. ¿Habría esperado Cecilia los seis años de estudio de su futuro maridito? - Da la sensación que su decisión de hacerse enfermera y, por tanto, independizarse de la familia tiene más que ver con el deseo de romper con los que la dañaron que con una verdadera vocación profesional.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los obstáculos alimentan la pasión entendida como deseo, de acuerdo. Pero yo usaba (seguramente mal) pasión como sinónimo de amor romántico. Ese sentimiento que va más allá del deseo y que es más complejo que este, entre otras cosas porque lo incluye.

      El amor, cuando crece, cuando madura y se hace inequívoco, sólido, fuerte, pierde parte del poder devastador que tenía en sus inicios; en esa fase de enamoramiento inexplicable que nos vuelve vulnerables, nos desorienta y aturde. Esa fase en la que no hay forma racional de entender lo qué nos pasa y vivimos en una montaña rusa de ilusión, desazón y vértigo.

      C y R están en este precioso punto de su relación en la primera parte del libro, la única en que comparten espacio.

      ¿Cuál es el problema de la relación de estos dos chicos y posiblemente lo que nos atrae/atrapa como lectores? Que Briony, Lolita, el mundo que les toco vivir, o puede que el destino, les niega la oportunidad de cultivar este sentimiento nuevo que nace entre ellos. Nunca sabremos si el roce y el tiempo los conduciría al regocijo, la paz y la armonía, o por el contrario a la indiferencia, el desengaño o incluso el odio (que ya sabemos cómo acaban a veces estas cosas).

      Eliminar
    2. "a gran historia de amor de la novela es la de Robbie y Cecilia, y parece más que crea esperanzas que desolación".

      Las esperanzas frustradas como las de nuestro malogrados amantes son desoladoras en si mismas, inaceptable la desolación como efecto colateral en este caso, querido amigo/a.

      Eliminar
    3. Todo depende, claro, del valor que se le dé a la mini-fiesta bibliotecaria. Seamos optimistas, pensemos que ambos compartieron el mismo reconfortante pensamiento en el postrero instante: ¡que me quiten lo bailao!

      Eliminar
    4. De El amor, cuando crece, cuando madura y se hace inequívoco,

      Pones el dedo en la llaga en uno de los grandes problemas de la literatura amorosa: es mucho más sencillo hacer un libro de pasiones que de amor sosegado. - igual ocurre en el cine, ¡los premios suelen caer en interpretaciones de personajes extremos y no de gente común!

      Quizá eso añade un punto de valor a nuestro leído Steigner. - en los dos sentidos del término.

      Romeo y Julieta sigue siendo un éxito por el palme temprano de los dos niños, quién sabe si de haber podido crecer se hubieran convertido en Enrique VI y la reina Margarita. - ¡vaya par!

      Este viernes, había un debate interesante sobre eso en el NYT - lastimeramente, en inglés:



      ¡Gracias por el comentario!

      Eliminar
    5. Aquí el enlace perdido:

      http://www.nytimes.com/2014/02/09/books/review/how-does-the-classic-marriage-plot-stand-up-in-2014.html?hpw&rref=books&_r=0

      Eliminar
  18. Emily y Hermione se nos presentan como el día y la noche:

    - E. decidida a aguantar lo que le echen en aras de un espejismo de familia feliz ideal; su preocupación guardar las apariencias.

    -H. rEnuncia a la seguridad del hogar, a sus hijos, a su "patria" ;), a su reputación, ... por seguir a un "gran amor", que además se nos da a entender que tampoco es que sea un gran partido.

    Dos mujeres, dos visiones del mundo, dos formas de vivir la vida. No me veo en condiciones ni con ánimo de erigirme en juez y decidir cuál es la adecuada. ¿Quién se equivoca y quién no? Porque es obvio que ambas opciones son inconciliables.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. O no. Parece que, por lo menos durante un tiempo, el señor Tallis lo,consiguió.

      Eliminar
    2. La historia de la música nos habla de otro Tallis, Thomas, que logró nadar y guardar la ropa en los turbulentos años de la reforma religiosa inglesa. Al parecer nuestro amigo fue apreciado tanto por protestantes como católicos. Será cosa de familia.

      Muy astuta tu observación. ;)

      Eliminar
    3. Todo depende del filtro que usemos para mirar. Si, por ejemplo, escogemos el histórico-militar, Emily es un trasunto de Chamberlain y Hermione de Churchill. Esa relación nos regaló una de las mejores frases del futuro Nobel de literatura, que me siento incapaz de no consignar aquí. Tras la vuelta de una reunión con Hitler, el amigo Winston le reprendió al otro:

      Os dieron a elegir entre el deshonor y la guerra. Elegisteis el deshonor y tendréis la guerra.

      Recomiendo usar esa fórmula en todo ámbito y situación. Ejemplo, gastronomía: os dieron a elegir entre el bogavante y las empanadillas de pollo. Elegisteis..

      Eliminar
  19. Pasión de Cristo.

    Efectivamente el hijo de Dios viene a este mundo con el único propósito de enseñarnos el camino hacia el Padre y muere en la cruz para arrancar el pecado del mundo, es decir, su sacrificio representa la expiación de toda la humanidad.

    ¿Qué se sugiere? Que C y R deben morir para que los demás personajes de la sección "privilegiada" se den cuenta de sus faltas y encuentren o reconduzcan su camino ¿?

    ¿Es por esta pasión/calvario/sufrimiento y muerte de los amantes que a los Marshall les da por la caridad, a Briony por la literatura y al señor Tallis por separarse de su mujer?

    Es curioso, los Marshall son los únicos comensales no inocentes de aquella "plácida" cena que parecen librarse de la "ira divina":

    - B. consigue llevar una vida plena en lo personal y lo laboral, pero una cruel enfermedad la azota en la recta final de su vida.

    - El indolente Leon sufrió separación tras separación y después un importante deterioro físico.

    - Emily ve como su idílica familia se desmorona.

    Como la vida misma, los delitos, para quedar impunes, hay que hacerlos a lo grande.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hum, ahora teología... En el libro se explica la función del autor como dios, demiurgo que crea y destruye a su antojo. La expiación, tal vez, sea el propio sacrificio.

      Eliminar
    2. Mucho calado, por otra parte, tiene esa afirmación sobre el grado necesario para estar más allá de la culpa y la expiación. Vastas praderas abiertas.

      ¡Excelente aporte!

      Eliminar

¡Gracias por participar!